El ritual que hacían para conmemorar al nuevo alfa fue perturbador para Hannah, incluso para Clare que aunque conocía las formas, nunca había presenciado uno.
_¿Te sientes bien?, preguntó Clare a su hija y ella corrió despavorida hacia el baño.
No sé sentía preparada para algo así se decía así misma.
_No es necesario que vuelvas a la ceremonia, Max lo entenderá, comentó Clare.
_Estaré bien, no debes preocuparte por mí.
_Como prefieras...
Se sirvió un gran banquete, en la mesa central se encontraba Max junto a su padre y varios líderes importante, algo que sorprendió a Hannah quién observaba en la segunda mesa con su madre.
_¿No debería estar sentada junto a su familia?
_No te hagas ilusiones querida... ¿qué es lo que pensabas?
_Me convertiré en la luna de la manada, yo debo ocupar un lugar en su mesa.
_Es cierto, el alfa debe estar con su luna. Pero tú no puedes serlo.
_No entiendo.
_Si presenta una humana frente a su manada y a los grandes líderes, nadie lo tomara enserio.
_No debes