Clara levantó su delicada mirada en un gesto de confianza y avanzó hacia Alejandro. Por un instante, el corazón de Alejandro palpito fuertemente. Se hizo un nudo en la garganta, y su musculoso cuerpo se tensó aún más bajo su traje. Cada parte de su cuerpo parecía conectado a Clara, deseando estar cerca de ella en ese mismo instante.
Jimena frunció el ceño, abrazando a Alejandro con más fuerza, y demostrando su posesividad Sintió claramente que Alejandro no solo conocía a esa hermosa mujer, sino que también le importaba mucho.
Justo cuando Alejandro pensó que Clara se dirigía hacia él, ella pasó suavemente junto a él, rozándolo ligeramente.
—¡Christian! —exclamó Clara, dejando atrás a un Alejandro completamente desconcertado. Fijó su mirada en él y sonrío, llamando así su atención.
—Oh, ¡mi dulce amor! —exclamó Christian, emocionado al ver a Clara como si fuera una amiga querida, a la que había extrañado mucho. Extendió la mano en un gesto de saludo que solo dos personas íntimas podrían