Capítulo 42

Intento explicarle desde el momento que venimos aquí y el propósito del que estamos aquí, pero que no podíamos decirle por qué es obvio que no lo aceptaría. Veo su expresión y me ha quedado claro que no me cree porque sus ojos y mis actos dicen otras cosas.

Cierro mis ojos y le suelto de golpe que Rafael me dio un beso, pero no fue algo que significara y menos comprometernos en algo serio. Falle y me arrepiento por eso, pero no puedo regresar el tiempo, dado que todo esto es mi culpa.

—¿Qué mierda estás diciendo, Lizbeth? ¡Te besaste con él! —sin esperarlo lo siento sobre mí, me agarra del brazo y lo estruja.

Está agresivo, jamás en mi vida lo había visto así, está cegado por los c

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados