Pov Vanessa:

Despierto adolorida y confundida, mi mirada va de un lado al otro intentando reconocer el lugar en el que me encuentro. Una voz preocupada se escucha a mi costado.

- Vanessa que bueno que despertaste, no te esfuerces demasiado.

Ahora lo recuerdo, estoy en un pueblo, se supone que vine aquí para ayudar y resulta que ahora soy la que necesita ayuda. Vanessa que estas haciendo con tu vida, eres una doctora no puedes dejar que cosas como estas afecten tanto tu juicio y profesionalismo.

Apenas y logró hablar, sentía mi garganta seca y rasposa. - ¿Cuánto he dormido?

- Un día entero.

Ruido los ojos agotada. - Ja que buena doctora soy, como puede ser que descanse tanto cuando se supone que tengo que estar trabajando.

- No Vanessa, por favor no seas tan dura contigo misma. Todos estamos iguales, agotados porque esto era algo que nadie esperaba así que no te culpes.

Intento sentarme, pero me cuesta mucho, las manos de Lautaro se mueven rápido y sostiene con fuerza m