—¡Iván, no te acerques a él! ¡Él secuestró a mamá, le hizo daño!
Ignacio levantó la vista sorprendido, encontrándose con dos rostros idénticos, como si fueran copias exactas el uno del otro.
—Eh, ustedes…
Ignacio estaba completamente confundido, alternando su mirada entre Iván y Mateo, preguntó con