Cásate conmigo.
CAPÍTULO 74.
A las seis Nicole llego a casa a tiempo, primero jugo con Adam por un tiempo y luego comenzó a prepararse.
―Señora, ¿va a salir? ―el ama de llaves vio que tomo el coche del bebe y algunas mantas.
―Sí, pero primero quiero llevar a este caballerito a dar un paseo.
Mirando la linda carita, ella no pudo evitar derretirse y levantarlo con cuidado. Después de varias correcciones y enseñanzas del ama de llaves, aprendió a sostener a su propio hijo.
― ¡Está oscureciendo afuera y la temperatura bajaba considerablemente, abrígalo bien!―le grito la mujer desde la cocina.
Nicole respondió y cuidadosamente le puso un abrigo grueso y lo envolvió en una pequeña colcha antes de salir.
Las luces empezaban a brillar intensamente, y muchos padres caminaban con sus hijos.
―¿Lo viste? Esa es la estrella Polaris, ¿no es hermosa?
Nicole inclinaba de vez en cuando la cabeza y susurraba suavemente al bebe. El pequeño miraba con sus ojos azules el cielo, y sus brazos y manos se movían inqu