Erin no había llegado aún a casa así que no pudo leer el mensaje de Nana hasta media hora después, ya se había duchado y cambiado de ropa, cuando abrió el mensaje su expresión pasó de calma a colérica. Su padre realmente era capaz de lo que él creía, si no ¿cómo había llegado Ashley hasta ahí? Se apresuró a salir de casa y llamar a Nana para avisarle que iría a resolver el problema mientras su chófer preparaba el auto, sin embargo, su padre lo detuvo en la entrada de la propiedad.
-¿A dónde crees que vas?
-¿Cómo te atreviste a hacer eso papá?
-Me atreví porque Michael es mi hijo y la empresa que dirige es mía y sé qué es lo que le conviene.
-Pero, ¡papá!
-No hay peros Erin, no saldrás de aquí.
-¡Papá!
Erin comenzó a forcejear con su papá para que lo soltara, no obstante, el hombre no cedió, estaba enfocado en conseguir su objetivo, no dejaría que Erin lo arruinara. Al mismo tiempo en casa de Michael todos dormían, las luces ya se habían apagado. Nadie esperaba la llegada de Erin. De t