Después de la llamada con su abogado y ahora padrino Michael propuso a Sofía tomar una siesta, la pareja había tenido un día y noche intensos y aún no se reponían por completo, por lo que Sofía aceptó. Subieron hasta llegar a la recámara matrimonial y se tendieron juntos para dormir. Con la cara acurrucada en el pecho de Michael Sofía dormía placenteramente mientras soñaba que caminaba descalza por el jardín sintiendo el pasto fresco bajo las plantas de sus pies.-Señora... Señora.La llamó Nana.-¿Qué pasa Nana hermosa?-Señora, el doctor Alan ha llegado para hacerle la ecografía correspondiente a su control del mes. Vamos adentro.-Está bien. -Buenos días, Sofía.-Buenos días Alan, ¿cómo estás?-Bien Sofía ¿Cómo te has sentido?¿Haz tenido alguna molestia por el embarazo?¿Mareos, náuseas, antojos?-Estoy bien, casi no he tenido náuseas y mareos no he tenido, antojos demasiados y aquí o me dejan comer mucho picante ni cosas ácidas.-Ja ja ja, sólo se preocupan por ti, es buena señ
-¿Quién es ese hombre?Preguntó Sofía a Nana.-¿Cómo que quién?Es su esposo, el señor Michael Adams.-¿De qué hablas Nana?El rostro de Sofía se ensombrecía cada vez más al escuchar las palabras de Nana, el hombre al que ella señalaba como su esposo junto al médico Sofía no podía reconocerlo. ¿Quién era ese hombre? No podía ser Michael, su apariencia no coincidía con la de su esposo.-¿Qué diablos significa esto?Nana, ¿quién es ese hombre?-No entiendo la pregunta señora, ese es su esposo el señor Adams.Vamos a recibirlo. Se alegrará al verla embarazada.Sofía empezaba a sentir que la cabeza le explotaría, ese definitivamente no podía ser su esposo, su apariencia no coincidía, aunque mientras más se acercaba su rostro le parecía conocido, caminó con Nana unos pasos más y al quedar a unos dos metros cerca de él su boca se abrió y sus ojos se llenaron de lágrimas.-¿Nana?¿Qué significa esto?¿Acaso estás jugándome una broma?-Señora, no. ¿Cómo puede pensar eso?¿Por qué le jugaría u
Notando el desconcierto de su esposo Sofía se apresuró a aclarar todo, lo último que quería era que el malinterpretara su pesadilla y discutieran.-¿Amor?Sólo fue una pesadilla, ya te la he contado para que algo así no ocurra.¿Estás bien?¿Por qué no dices nada?-Lo siento Sofía, es que... Debo preguntar...¿Aún piensas en tu ex?-Claro que no, ni siquiera sé por qué apareció en mi sueño. Te lo juro que no.Yo... Mírame, créeme no pienso en él. En el sueño yo te esperaba a ti y por eso me asusté, porque el hombre que decía Nana que eras tú no lo era. Pero todo estaba igual, era esta casa, esta habitación, el jardín, todo era igual, lo único que no tenía sentido era eso... Tienes que creerme.Michael no sabía si creerle o no a Sofía, lo que más le preocupaba era que si ella aún pensaba en Justin a pesar de estar casados, cuando supiera la verdad tal vez intentaría divorciarse y volver con Justin y eso lo aterraba. -Amor. Créeme.No pienso en él. Por favor, créeme.Algo dudoso resp
-Lo lamento Sofía. Es sólo que yo... Me sentí un poco celoso al saber que soñabas con tu ex.-¿Sólo un poco? Te expliqué el sueño e incluso te dije que lloraba porque no eras tú en ese sueño y ¿aún así te pusiste celoso?-Sí. -Eres un tonto. Yo sólo te quiero a ti.(Cuando sepas toda la verdad no creo que vayas a decir lo mismo.)-Bebe tu té y olvidemos lo que pasó ¿si?-Está bien. Pero no dudes de mi Michael.Después de que Sofía bebiera su té la pareja se recostó y volvió a quedarse dormida, esta vez Sofía ya no soñó nada, sin embargo, la víctima de las pesadillas ahora sería Michael.-Mi amor, despierta. Tu padre llamó, vendrá a visitarnos hoy junto a tus hermanos, tenemos que levantarnos.-Mmm, tengo mucho sueño Sofía. Hay que llamarles y decirles que no vengan, me siento cansado. Anoche el sexo estuvo muy intenso, necesito reponer energías.-Ja. Eso es culpa tuya, todo el tiempo quieres estar pegado a mí.-Es natural, somos esposos.-Voy a bajar y pediré a Nana que llame a tus p
-¿Michael qué hiciste?Preguntó Sofía preocupada. Todos los ingresos de Michael provenían de su trabajo en la empresa de la familia y de la mensualidad que su padre destinaba a cada uno de sus hijos, ahora sin el apoyo de su padre y sin trabajo sería complicado para la pareja mantener el estilo de vida que llevaban que si bien no era de excesos y lujos tendrían que empezar a prescindir de algunas cosas, por ejemplo de los empleados.Sofía se angustió por la situación y comenzó a caminar de un lado a otro haciendo muchas preguntas que abrumaron al hombre.-¿Qué vamos a hacer ahora?¿De qué vamos a vivir?Yo no tengo un trabajo y tú acabas de quedarte sin el tuyo.Esta casa es de tu padre ¿Tendremos que dejarla?¿A dónde iremos ahora?Yo no tengo familia ni nadie que me apoye. Jamás he trabajado en mi vida. ¿Qué voy a hacer?Frotándose las sienes intentó calmar a su esposa aunque él estaba haciéndose las mismas preguntas que ella.-Sofía cálmate amor.Vamos a arreglarlo ¿de acuerdo?Bu
-¡Te casarás! Ya he arreglado todo, hoy vendrán por tí y firmarás un contrato prematrimonial, te irás y no volveré a verte nunca ¡maldita bastarda!Dijo Irina a su hija Sofía dándole una patada en el estómago. -¿Por qué me odias tanto? ¡Eres mi madre, se supone que debes amarme!Sofía se quejaba, pero Irina no contestó, la había odiado desde el día en que se enteró que estaba embarazada de ella. Intentó venderla muchas veces pero siempre algo lo arruinaba todo, esta vez lo había logrado a través de un intermediario por nada menos que 100 millones de dólares, no conocía al comprador pero esperaba que fuera tan malo con ella que la hiciera desear estar muerta.Dos horas más tarde un hombre sudoroso de unos 200 kg tocaba a su puerta. Irina abrió y dejó entrar al sujeto de mirada hosca.-Vengo por Sofía, aquí está el contrato, sólo tiene que hacerla firmar y el dinero será transferido a su cuenta. Mientras más rápido firme mejor será para todos.-¡Sofía! Ven aquí estúpida.Gritó Irina ar
-Mi... ¿Mi esposo? -Así es, ¿por qué te sorprende? Le dije al gordo Jack que te lo informara en cuanto subieran al avión.-¡Pues no lo hizo!-Bueno, eso ahora ya no tiene importancia, mi nombre es Michael Adams y soy tu esposo, como te habrás dado cuenta firmaste un contrato que te prohíbe divorciarte de mí, así que más vale que te acostumbres y empieces a amarme porque no te dejaré ir.Sofía estaba atónita, durante todo el día había pensado que su esposo era aquel hombre gordo y sudoroso que había negociado con su madre y además la había golpeado, no obstante, descubrió que no era así, al parecer todo había sido una farsa para engañar a su madre, si Irina hubiera sabido que este Adonis era quien estaba pagando por ella la habría ocultado hasta por debajo del agua antes que dejarla ir con él. Para Irina Sofía no merecía ser feliz, menos con alguien como él; guapo, atractivo, elegante, adinerado y sexy... -¿Amarlo? Yo ya tenía a alguien antes de venir aquí y usted me apartó de él. ¿Po
-¿Qué? Eso nunca pasará. ¡Jamás amaré a alguien como tú!Como pudo apartó a Michael de su cuerpo y recuperó la compostura, no sabía exactamente que le había sucedido pero había perdido el control en un instante, eso no podía volver a sucederle o terminaría perdiendo más que su control con ese hombre que aunque era muy apuesto la había apartado del que ella pensaba era el amor de su vida, eso jamás se lo perdonaría.(No puede ser, mis pantis están mojados. Este hombre...)-Yo no estaría tan seguro si fuera tú, ni siquiera te besé en los labios y ya estabas gimiendo, estoy seguro que, en poco tiempo estarás suplicando porque te haga mía, pero no te preocupes no soy rencoroso, si me lo pides te complaceré, después de todo estaremos casados hasta que la muerte nos separe. Ja ja ja.Después de haber dicho eso Michael se dio la vuelta y salió de la oficina, Sofía corrió detrás de él, aunque no quería tenerlo cerca necesitaba preguntarle algunas cosas como por ejemplo, ¿dónde se suponía que