Capítulo 12

Cuando Rashad entró en la habitación de Asad, su hijo miraba con admiración a Khaliq y reía de una de sus anécdotas y para él fue lo mejor que le había pasado ese día. Su hermano inventaba historias sobres el desierto y tenía absorto en su relato a todos los que estaban en la habitación, sin embargo, los ojos de Asad se iluminaron cuando vio a su padre entrar.

—¡Papá!, al fin viniste. Tío Khaliq me estaba contando historias. ¿Sabes que él será mi donante? ¿Viste cuánto nos parecemos? Tenemos los mismos ojos, papá —dijo el niño en un torrente de palabras que lo hicieron sonreír.

—Lamento la tardanza, hijo, voy a ser el donante de Salma y fui con tu tío Samir a decírselo.

—Salma es mi amiga , me alegra que seas su donante, así ambos nos curaremos. Nos gustan los mismos videojuegos y ambos tenemos la misma Nintendo Switch[1] que nos regaló el tío Samir en Navidad, antes de saber que era mi tío —dijo Asad—. ¿Sabes que ella no tiene mamá ni papá? Por eso mi mamá también pasa tiempo con ell
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo