Cristian fitzy narrando:
Todos éramos adultos sentados a la mesa, ya habíamos cenado y ahora solo hablábamos animadamente de cosas banales y cotidianas.
- Hijo, ¿cómo van las negociaciones de tu nueva propiedad? _pregunta mi padre.
- Casi todo está bien, solo falta esperar a que el dueño regrese de su viaje para concretar la compra _digo_ Iré en algún momento de esta semana a echar un último vistazo al lugar.
- Cuando te vayas, avísame, iré contigo _dice mi padre.
- ¿Por qué decidiste comprar una casa, hijo mío? _pregunta mi madre_ no es que no quiera que vivas cerca de nosotros, al contrario, tengo muchas ganas, pero siempre te gustó vivir aquí.
- Ahora tengo razones para querer algo más tranquilo y menos concurrido, como una casa en un condominio _hablo_ un penthouse en medio de la ciudad me parece menos adecuado.
- No entiendo _dice mi madre_ ¿a qué se debe todo esto?
En el momento en que me levanto con Joana a mi lado, todos tienen sus ojos y su atención sobre nosotros.