Mientras Hadrien salía del mall agarrado del brazo de Alice, se volteó a verla y expreso
—Bien Alice, hasta aquí te acompaño, me voy
—¿No vas a llevarme a mi casa?
Hadrien la miro y se carcajeó —Alice allá está tu auto, jajaja
Alice ya no pudo refutar nada, solo dijo
—Adiós Hadrien, despídete de mí como debe ser — le agarro el rostro y le dio un gran beso
Hadrien sonrió exclamando— Adiós Alice
Se subió a su auto, salió del mall y manejaba intranquilo, esa pasividad de Jacob le molestó mucho, lo conocía y eso fue raro, seguía manejando y mejor pensó en otra cosa, en la reacción de su nana al regalo que le llevaba.
Cuando entro a su mansión fue recibido por su nana, estaba muy alegre y había un aroma a chocolate
—Mi niño, le tengo una sorpresa, venga al comedor
—Huele rico, nana, ¿qué es?
La nana le tapó los ojos y le dio la mano para guiarlo, Él ya la conocía, se dejó llevar, lo paro frente a la mesa y le dio en la mano un cuchillo y dijo.
—Abra los ojos mi niño … “Sorpresa”