30. LOS EXILIADOS
Casi es medio dia y el sol brilla radiante en todo el pueblo. Sin embargo, una nube gris se posa sobre Cristopher y Alexa.
— ¡Quiero que te vayas ahora mismo de aquí! - dice Alexa de una manera muy cortante.
Cristopher queda en Shock. Aquellas palabras se clavaron en su corazón como cien dagas afiladas.
— ¿No me oyes? ¡Quiero que te vayas de mi casa! — dice de nuevo.
— ¿A qué te refieres Alexa? ¿A donde podría ir? — responde Cristopher cayendo en cuenta.
— No lo sé. Sólo se que no quiero verte. Lo de hoy fue algo horrible ¿Cómo pudiste? — dice con los ojos vidriosos.
— Entiendo... En verdad lo siento mucho - dice lleno de verguenza.
— Sentirlo no basta — responde Alexa y luego se marcha.
Cristopher la ve alejarse sin poder decir nada. No sabe que ha pasado con él; antes fuese tenido algun argumento para defenderse; o mejor aún, no se fuese metido en un problema de tales magnitudes.
Ahora Alexa lo tiene a él como el malo de la partida cuando en realidad quien quiere aprovecharse de el