La vida es tan impredecible que todo puede cambiar en poco tiempo.
Los tiempos difíciles tienden a fortalecer a la persona.
Era domingo, a las doce en punto cuando Aly se había acomodado tranquilamente en su sala, sonó el timbre y era el barrio del barrio.
- Ve a tomar asiento… le dijo entrando a la sala.
- Gracias
- Te sirvo algo, agua, bebida, café
- Oh, gracias, un poco de agua servirá.
Sale y va a la cocina, Aly siempre ha sido así, trata bien a todos hasta a sus propios empleados, en fin todos somos iguales ante los ojos de Dios.
- Tienes un invitado... pregunta Halima que estaba preparando el almuerzo.
- Si, es el guardián del barrio.
- Ah si ya veo, siempre tan respetuosa con cualquiera, siempre recuerdo esa famosa frase que sueles decir.
- Nadie es superior a su prójimo en este mundo
- Efectivamente, tienes un corazón puro ♥️, sin halagarte eres simpático, pero no olvides que mañana es lunes, vuelves al trabajo.
- Ahora la señorita me está presionando para que retome el trabaj