NARRADOR
Emma y Taylor pudieron descansar en total calma. Ambos se sentían en las nubes, su amor los hacía sentir seguros. Por esta razón, se quedaron dormidos y fue Emma quien despertó a Taylor a la mañana siguiente.
—Vamos, Taylor. Se nos hará tarde para la universidad —Emma lo mueve para que despierte y la suelte, ya que él la tiene bien sujeta de su cintura. Así durmieron durante la noche.
—Aún es temprano —habló Taylor, aún con los ojos cerrados, y abraza con más fuerza a Emma.
—No, ya es tarde. Perderemos la primera clase si no te levantas ahora y me sueltas —Emma ansiosa, pues desde que comenzó la universidad nunca había faltado a ninguna clase.
Taylor abrió los ojos y vio el reloj en la pared de la habitación de Emma. Abrió mucho los ojos y luego salió corriendo de la cama.
—Dios mío, mi ángel. Tengo un examen en la primera clase —Taylor le dio un rápido beso a Emma y corrió a su habitación a ducharse.
Thalia, quien iba saliendo de la habitación, se apartó rápidamente del cami