Lágrimas del corazón ES

Dastan: nunca voy a poder amar a mi prometida. Porque no siento nada por ella y en cambio por su hermana siento un amor que no va a poder ser por mi compromiso con ella.

Leónidas: entonces rompe tu compromiso si quieres ser felices al lado de su hermana. Además, no creo que sus padres permitan que hagas eso.

Dastan: ni yo tampoco lo pienso hacer y la razón de eso es que la respeto. No quiero romperle su corazón y se perfectamente que me ama, así que cumpliré con mi palabra de matrimonio. El único problema es que ella jamás ha significado algo para mí, a pesar de que tengo años de conocerla.

Leónidas: será difícil cumplir con tu palabra y pienso que debes de hablar con ella para que le digas todo lo que me has dicho, aunque sea demasiado doloroso.

Ella había llegado a la empresa de su prometido para hablar con Dastan, pero por casualidad escucho toda su conversación, así que cuando terminan de hacerlo, Mariana entra a su oficina y Leónidas cuando la ve se retira

Mariana: lamento entrar de esta manera a tu oficina. Solamente vine a decirte que nuestro compromiso queda cancelado y de esa manera ya no seré un obstáculo para que te puedas casar con mi hermana. Porque gracias a ti conocí lo que era el verdadero amor y sobre todo ya no llorare lágrimas del corazón por tu desamor, siempre te recordare como mi primer amor, pero este sueño se termina ahora y sobre todo jamás hiciste oficial nuestro compromiso, así que no existe ningún lazo que nos une. Nada más que ahora eres un hombre libre como siempre quisiste y en verdad deseo que sean feliz.

Dastan: no creo que eso pase si estás enamorado de mí. Nuestras familias nunca lo aceptaran y tendremos que seguir con la boda como ellos lo tenían planeado.

Mariana: no te preocupes por eso. Estoy segura de que mis padres aceptaran que te cases con mi hermana, porque ellos siempre han querido su felicidad, yo solo era un obstáculo para que ella lo lograra.

Dastan: quisiera saber qué es lo que pasara contigo si ya no te convertirás en mi esposa. Solamente que me puedo imaginar cual será tu destino.

Mariana: estaré soltera el resto de mi vida. Pero quiero que olvides nuestra historia y te concentres únicamente en ella, además nunca llegue a despertar en ti ese sentimiento llamado amor y por eso prefiero que seas feliz a su lado. 

Dastan: tienes razón. Porque nunca debimos de estar comprometidos desde un principio y eso es precisamente lo que pienso y en verdad lo siento.

Mariana: pienso que sus disculpas están demás en nuestra conversación. Ahora que al fin todo ha terminado me tengo que ir y el día que quiera se puede casar con mi hermana.

Dastan: entonces ya no eres mi prometida y la razón de que nunca lo hice oficial es que nunca espere casarme contigo y te agradezco la decisión que tomaste y estoy seguro de que nunca me arrepentiré.

Mariana: quisiera pedirle un último favor y es que cuando vaya a mi casa no me mire. Además, nos trataremos de la misma manera que lo hemos hecho, esa sería con indiferencia de su parte y el verdadero amor que siempre imagine se termina este día de una manera definitiva.

Ella se despide de el para salir de su oficina. Mariana tenía que sonreír a pesar de que se sentía triste, ella ya no estaba dispuesta a sufrir más por su desamor y tenía que aprender a olvidar este sentimiento que no le hacía ningún bien, porque de nada le sirvió hacerse ilusiones con su amor, ella después de unos minutos llega a la salida de la empresa y se sube a su auto para poder dirigirse a su casa

En la casa de la familia Silverman

Nicolás: debemos de hacer algo para que Mariana rompa su compromiso. Porque no quiero ver a Jade sufrir y fue un error al no hacerlo a tiempo.

Amelia: ella algún día se cansara de su indiferente y se dará cuenta del amor que siente por nuestra segunda hija, nada más que ella sufrirá una desilusión por tener un amor no correspondido.  

Nicolás: aunque para ella será demasiado difícil otro compromiso. Solamente que todos piensas que se va a casar con Jade, además nunca hizo ningún intento de aclarar esta situación.

Amelia: tienes razón y si eso llegara pasar nadie nos cuestionaría. Debemos dejar que las cosas sigan iguales como hasta ahora, pero sobre todo él no la ama.

Ella tiempo después llega a su casa y cuando entra escucha la voz de sus padres. Mariana se dirige a donde estaban y se imaginaba de qué estaban hablando, porque cuando llego a su lado guardaron silencio

Mariana: quiero decirles que ya no me casare con el señor McGregor. Así que ahora deben de preparar la boda de mi hermana y no tiene ningún caso que siga viviendo en esta casa donde nunca me han demostrado cariño, además me iré a vivir con mi tía.

Nicolás: mi hermana te recibirá en su casa con mucho gusto. Nada más que el único problema es que está a las afuera de la ciudad y será difícil que vengas a visitarnos.

Mariana: estaré bien a su lado y seguramente el no tardara en venir a pedirle la mano en matrimonio de Jade. Pero mañana me iré y no pienso volver, solamente necesitare llevarme las pocas cosas que tengo.

Amelia: entonces que te vaya bien en tu nueva vida y espero que encuentres a una persona que te ama. Porque el jamás fue para ti, nada más que al fin lo entendiste.

Ella se despide de sus padres para poder dirigirse a su recámara. Sabía perfectamente que eso pasaría y Mariana se iría en paz, ella sube las escaleras y a los pocos minutos llega, solamente que le esperaba una gran sorpresa que consistía en un hermoso ramo de flores rojas y en ella también se encontraba una carta que estaba dirigida a ella, sonríe cuando las tiene entre sus manos para después abrir la carta que decía

                                                                          Para mi bonita

Recuerdo que te hice la promesa de hacerte feliz y al fin he regresado únicamente por ti, necesito decirte que nunca te olvide, además fueron diez años que deje de verte. Porque mis padres querían que estudiara en el extranjero y después de ese tiempo al fin volveré a verte.

Siempre fuiste demasiado importante para mí. Recuerdo cada uno de los momentos que vivimos juntos y mañana iré a verte, solo te pido que me esperes.  

                                                                          Atentamente

                                                                Lucas Hamilton Reynolds

Mariana: no puedo creer que mi mejor amigo haya regresado. Necesitaremos hablar de tantas cosas y espero verlo antes de irme o si no se puede le enviare una carta explicándole las cosas.