>>> Adalet:
De repente, volví a despertar.
Esta vez, no estaba en el laboratorio ni en el bosque.
Estaba en el césped, cerca de una colina, bañada por los rayos naranjas del atardecer.
Mi corazón latía con fuerza mientras me sentaba, confundida, mirando a mi alrededor… ¡Otra vez era yo!, mi actualidad, mi adultez.
—Zefor… —susurré, mi voz temblaba de miedo, mientras llamaba por él.
El vacío me rodeaba… ¡Quería verlo!, sentí tanto… Tanto terror, mientras mis lágrimas emergían, y rápidamente las limpiaba.
Pero no había respuesta de ese Alfa.
Solo el silencio del bosque.
Entonces, de entre las sombras, apareció un hombre desconocido. Vestía ropas negras, y su cabello castaño caía sobre su frente, ocultando parte de su rostro.
—¿Estás buscando esto? —dijo, levantando el anillo que había visto antes… Que me había puesto.
El terror y la confusión se entrelazaron en mi pecho.
Mi corazón se aceleró.
—¿Qué has hecho? —retrocedí, sintiendo el miedo apoderarse de mí nuevamente