Ahora entiendo porque tenía esa necesidad inminente de estrechar la mano, necesitaba conocer su verdadera naturaleza, menuda sorpresa. Al fijarme a detalle en el rostro de él, caí en cuenta que tenía muy definidas todas sus facciones. Es rubio, ojos celestes y tiene los labios rojos. De hecho, su aspecto es todo lo opuesto a un vampiro. Tenía entendido por medio de películas que eran carentes de vida, ya que son seres muertos o eso pensaba, ya que Domenic es lo opuesto a la palabra muerte. Me percate de otro detalle, Domenic se encontraba mirándome de la misma manera que yo a él, fascinado.
- ¿Tú no eres humana o sí?
- Tú tampoco eres humano. Bueno, en ese caso, tanto tú como yo tenemos preguntas ¿qué te parece si vamos a por un café?
- Eres una máquina de sorpresas, ya que por lo general el que invita soy yo, pero no me niego, es más, siento cierto nivel de halago que un ser tan especial me esté invitando.
- De hecho, es mutuo, es la primera vez que hablo con un vamp…
Al instante que