Se preguntarán qué pasó con Víctor... Pues Yulia lo dejó encerrado en la mazmorras de su mansión, él jamás saldría de ahí hasta morir.
Los meses pasaron en un abrir y cerrar de ojos y la pequeña Victoria ya tenía un año, el tiempo que estaban esperando Máximo y Celia para celebrar su boda a lo grande como lo prometieron.
CELIA :
Hoy celebro mi boda a la grande y estoy nerviosa, tengo a mi lado todas las personas que amo y las que siempre han estado conmigo en todo momento.
– Mi niña... Desde hoy inicias una nueva etapa de tu vida... Sé feliz, te lo mereces.
Dice Patri con lágrimas en los ojos.
– Gracias Patri.
Digo abrazándola.
Mi madre Cintia se acerca a mí con una sonrisa.
– Sé que no estuve para tí cuándo más lo necesitabas, pero espero que seas feliz con el hombre que has elegido... Y quiero que sepas que estaré para cualquier cosa que necesites.
Dice abrazándome con cariño.
– Ya es hora de irnos señoritas.
Nos interrumpe Marcos, enfundado en un lindo traje negro.
Nos marchamos de