"Sé lo que estás pensando, hermano, pero llevas un tiempo alejado de esto. Papá me ha tenido coordinando con otros Betas de la Manada durante años, y en cada reunión hablamos de ella". Dallas miró a Bear, quien asintió. "Nuestras órdenes permanentes para la Manada son observar e informar, hasta que podamos tener a todos los guerreros y Betas que tenemos cerca de ella. No la subestimamos, jamás".
Era mucho que asimilar. "Bueno, estoy cansado y de mal humor. Voy a limpiarme y a dormir un poco. Dallas, ¿podemos hablar por la mañana?"
"Hablaremos de nuevo después de que hayan revisado los archivos", dijo mi papá. "Váyanse. Los demás tenemos que hablar sobre lo que esto significa para la Manada". Me levanté, besando a mi mamá en la mejilla al salir, y cerré la puerta tras ellos.
Si esto fue un desastre para mí, también podría haber consecuencias para mi manada. Estaba atrapado en un campo minado sin mapa. De camino a mi habitación, tiré la memoria USB sobre el escritorio y me di una ducha