Punto de vista de Seraphina
El último mes fue una tortura. Me pasaba las noches acurrucada en un colchón mugriento, pensando en las caricias de Kit. Pensando en volver a abrazar a mi hija. La rabia interior me mantenía caliente. No sabía dónde estaba Kit, pero podía sentirlo.
El lazo que nos unía se