Capítulo 46: Un nuevo nacimiento
La mansión había sido un hervidero de expectación en las últimas semanas. ¿Y como no? El cuarto del bebé ya estaba listo, estaba decorado con tonalidades azules y grises también según estaba lleno de juguetes y ropa de varón que Adrián había comprado porque según él, sería un niño. Violet, ahora lucia su vientre enorme y la fecha de parto les estaba al límitelos nueve, ella sentía las emociones y los nervios a flor de piel. Había superado las nueve meses de embarazo con gracia, asistiendo a sus clases y disfrutando de la compañía de Adrián y Alexander, cuya presencia se había vuelto una parte esencial de su día a día. ¿Loco cierto?.
Ese día, sin embargo, Adrián tuvo que ir a la base. Era su última jornada de trabajo antes de tomar su licencia extendida por paternidad, y debía delegar responsabilidades clave para la próxima misión en el Medio Oriente.
—No te muevas ni un centímetro de la mansión, Violet —había dicho Adrián esa mañana, besando su frente