Voces en eco, gritos y bullicio por peleas, se filtraba por las pequeñas rejillas de la ventana, marcando sombras frías sobre las paredes grises. Jankel se encontraba sentado en el banco de concreto, mirando al frente sin realmente ver nada. Los ecos lejanos del bullicio de la prisión llegaban hasta él, pero él estaba atrapado en su propia mente, enredado en pensamientos oscuros y recuerdos de lo que había hecho. Maquinado su próximo paso una vez que salga de prisión. Pero sabe que debe tratar que ahora sí lo trasladen a su país, porque si lo juzgan en Canadá estaría perdido.
Todo había empezado con la idea de tener el control, de recuperar lo que había perdido. Había sido un hombre que pensaba que siempre podía manipular a los demás, que podía hacer que todo a su alrededor se ajustara a su voluntad. Pero ahora, aquí, entre rejas, las paredes parecían cerrarse cada vez más, y todo lo que había intentado controlar le había explotado en la cara.
"Pensé que tenía todo bajo control... tod