Cuando vuelvo a la pequeña casa de invitados, los guardias me esperan afuera y me encierran. La casa es básicamente una gran habitación, y puedo ver a través de las ventanas que están recorriendo el perimetro. También sé que la casa tiene micrófonos ocultos y que hay câmaras en el exterior.
Va a ser casi imposible escapar, pero no me voy a rendir. Lo primero que tengo que hacer es avisar a Vitaly. Si me voy ahora y voy por Nolia, quizá no pueda decírselo después. Quiero poder encontrarla y largarme de aqui antes de que sospechen nada, pero no puedo apostar su vida y la de Pru en ello.
Me quito la bota, abro el compartimento secreto del talón y saco el rastreador. Vitaly tiene gente vigilándolo en todo momento, asi que le doy tres golpecitos al botón antes de tirarlo al suelo y aplastarlo. Esa es la señal de que se avecinan problemas y de que hay que estar preparados. No es suficiente, pero es todo lo que tengo. Si llamo o hago algún movimiento para comuni