Capítulo 72.
Mateo abrió la puerta de una habitación y nos detuvimos en un balcón. A lo lejos, se veía un gran grupo acercándose al castillo.
—Supongo que esos no son amigos de los idiotas ¿Verdad?
Mateo negó con la cabeza y tensó el cuerpo. Detrás de nosotros, entró corriendo el pequeño rey.
—¿Qué m****a...?
No tuvimos que decirle nada, podía ver él solito a los cientos de lobos acercándose.
—Estás muy jodido. Ya ha llegado la mitad del batallón personal de Cole y son solo unos pocos lobos. El pueblo cercano a ese batallón ha sido invadido y tuvieron que dividir fuerzas. Por lo que puedo suponer, ese pueblo ganadero es de donde sale la carne que llega a esta ciudad ¿No es así? — Dije juntando las piezas del rompecabezas.
—Si. — Dijo Karel con los dientes y puños apretados.
Un grupo más pequeño se reunió a las puertas de la ciudad. Suponía que era el grupo de Cole y algunos pocos guardias.
—Aún quedan algunos lobos dentro del castillo— Dijo Karel.
Mateo escribió algo y se lo pasó a al idio