Narrador.

Esa mañana Carlota Zimmerman miró la maleta que tenía preparada desde hacía ya semanas, había llegado el momento de romper esa extraña y conflictiva relación que mantenía con Murray Campbell, habían pasado varios meses casi un año, que su relación había cambiado, y todo por su negativa a que ella cediera para que aceptara lo que Murray le proponía, que se abriera por fin a ser su pareja, su esposa, y la futura Lady Campbell.

La negativa a la propuesta de la alemana estadounidense, provocó un cambio casi de rompimiento en la relación de amistad, aunque no laboral, que ambos mantenían, Murray dejo de ser ese hombre burlón y amable, hasta cariñoso, e incorregible, que solía molestar, y burlar, de forma afectiva, a su adorada representante, para convertirse en un ser exigente, serio, frio, y hasta torturador, en ocasiones.

Nada le parecía bien, era como si quisiera castigarla, como si fuera un estúpido y caprichoso adolescente, claro que él no era un adolescente, era un ser