Regresamos nuestra atención hacia los nuevos lobos que se acercan, desgarrándolos. Oigo su gruñido y sé que ha recibido un golpe en el mismo momento en que siento unas garras deslizarse por mi costado. Me giro, agarrándome a la nuca del salvaje. Donovan sacude la cabeza con ferocidad, rompiéndole el cuello.

Estamos rodeados, Lily y yo estamos espalda contra espalda, protegiéndonos mutuamente cuando el resto de la manada llega finalmente, con Anders y Patrick al frente. Inmediatamente vuelvo a la ofensiva, destrozando a los salvajes y vigilando a Lily, asegurándome de que no esté demasiado herida.

Cuando por fin termina la batalla, todos nos volvemos a reunir junto a Zed, el lobo de Patrick. De repente, varios guerreros retroceden y me doy cuenta de que todos miran de Donovan a Andra.

“¿Tenemos dos Guardianes?”.

“Mierda, ¿cuándo pasó eso?”.

“Ahora nadie puede derrotar a nuestra manada”.

Más guerreros empiezan a retroceder y Donovan gruñe, poniéndose delante de Andra. Patrick tamb