En realidad esto último me lo saqué de la manga, no pensaba dormir en la misma habitación que Emma, pero con su comentario me dio la idea y la excusa perfecta no sólo para que Amme no la persuada de cancelar el compromiso, sino para tenerla más cerca de mí y convencerla de casarse si es que lo está dudando, además tengo un amiguito que seguro va a querer sentirla muy cerca.

-¡¿Tú no tienes vergüenza, Keller?

-La tengo, pero no para esto, Emma será mi esposa. ¿Qué tiene de malo que duerma conmigo?

-¡Pero aún no lo soy Keller!

-Lo sé bonita y no quiero fastidiarte o contradecirte y mucho menos a ti, cuñada hermosa, pero da la casualidad que quien envió la nota podría estar dentro de la mansión.

De ser el caso, mientras más seguro esté de que las cosas entre Emma y yo van en serio, mejor.

Tranquilas las dos, no pienso aprovecharme de la situación ni propasarme con Emma, eso que tiene que suceder sucederá eventualmente.

Les hablé casi susurrándoles al oído aunque con mi tono burlón c