Harry
Debo reconocer, con gran pesar, que no somos tan diferentes el uno del otro.
La guerra ha sido declarada, solo habrá un ganador y seré yo.
Desde mi partida, mi madre y mi vicepresidente dirigen mi empresa; gracias a mis numerosos contratos, nunca estoy presente. Y eso me conviene muy bien. Mi hermano querrá ponerme la mano encima, aunque será difícil para él hacerlo. Se creyó astuto en el pasado, ahora es mi turno. No pienso detenerme en tan buen camino.
Esa mujer que era mía y que lo sigue siendo, permanecerá así. Se la arrebataré. Puede que vigile sus espaldas.
Esa mujer, no pienso abandonarla. Debemos realizar un viaje a Birmania para resolver algunos asuntos de orden público. Estaré allí durante dos semanas, a mi regreso, le infligiré el golpe de gracia.
Héctor
Acabo de llegar a mi oficina y ya llamo a mi hombre de confianza para encontrar a ese hijo de puta.
- Búscalo en los lugares que suele frecuentar. No dejes pasar ninguna posibilidad, encuéntramelo rápido.
- Como si ya