La actitud de Daryl es por completo diferente y esta vez Zoe la siente de verdad.
No se va a trabajar sin darle un beso, sus vitaminas y el desayuno, a la hora de almuerzo está clavadito allí con ella y por la tarde, regresa animado para estar con ella solo para hacer lo que sea y consentirla, porque eso sí, no se cansa de mimarla.
Es increíble la manera en que se está redimiendo por su comportamiento y lo que Zoe quiere es que eso se extienda lo más posible, porque esa versión dulce de Daryl es de lo más linda. Su esposo está feliz por el embarazo y ella se está relajando al fin, disfrutándolo también.
El día anterior Daryl llegó emocionado, solo la levantó entre sus brazos, la besó con devoción y la invitó a una cena muy importante con altos ejecutivos y los presidentes de grandes empresas.
Así que allí está ella, terminando de maquillarse para acompañar a su esposo a la cena.
Por supuesto, con un vestido negro, sencillo y recatado, para que no fuesen a mirarla más de la cuenta