Juliette Moreau

—Esta es una buena zona, ¿son muy elevados los alquileres por aquí?

La pregunta de Ian me hace concentrarme de nuevo en él. Todo el tiempo en el ascensor, y ahora mientras caminamos por el pasillo hasta mi apartamento, me lo paso pensando en lo que seguramente Aston creerá de esta visita.

No dudo que piense lo peor, que sea una ofrecida que solo quiere joderlo y seguir jugando con fuego, pero me vale un carajo esta noche. Ya mañana lidiaré con las consecuencias de mis actos.

—En realidad, es un beneficio de ser la asistente del jefe máximo —respondo cuando abro la puerta del apartamento y entro, seguida de Ian.

—¿En serio? No sabía que Lucifer, como lo llamas, podía ser tan generoso con sus empleados. Al menos no fue lo que demostró esta noche amenazando con descontarte sueldo.

Resoplo, lo invito a pasar y sentarse en los cómodos muebles de la sala.

—Te dije, no todo es como lo ven desde fuera. Para Aston Myers sus trabajadores son importantes, es un arrogante de cuidad