"¿Freya, por qué Axelle no se deja ver últimamente?"
La fuerte voz de Debbie interrumpió la tranquila mañana.
Freya se volvió hacia la ventana, como para asegurarse de que el auto de Arthur se había ido de la casa.
"Está ocupado," respondió Freya mientras tomaba un pan con gesto perezoso.
"¿Ocupado? ¿Tan ocupado como para ignorarte? ¿No sospechas nada?" preguntó Debbie, presionando a su hija, que ya estaba molesta.
"¡Mamá, deja de meterte en mi vida privada! ¡Sé cómo manejar a Axelle!" respondió Freya, empezando a ser cortante, pero sin lograr detener la reprimenda de Debbie, quien le ordenó a Freya que se tomara más en serio el asunto de arrebatarle Axelle a Elea.
"¿Deberías tener mucho tiempo para atrapar a Axelle, por qué no eres tan inteligente como Shera?" preguntó Debbie con enojo. Y, con no menos enojo, Freya tiró su vaso contra la mesa y se levantó.
"¡Porque no soy Shera! ¡Deja de compararme con Shera!" gritó Freya con furia antes de dejar a Debbie, quien finalmente se quedó c