¿Y si revelan la verdad sobre los niños, solo para que no fuera la respuesta que Duke buscaba?
El ambiente en la oficina era inquietantemente silencioso.
El tiempo pasaba minuto a minuto.
Adina estaba casi lista para volver a casa después de recoger a los dos niños del preescolar, pero cambió de opinión y se dirigió a la mansión de la familia Winters en su lugar.
No importaba cómo la tratara la Señora Winters, seguía obligada a cumplir su promesa a Harold.
Estaba concentrada en conducir, pero se distrajo momentáneamente cuando escuchó a Alden preguntar: "¿Qué pasa, Mel? ¿Te encuentras bien?".
Adina echó un vistazo al espejo retrovisor y vio que Mel, que siempre se sentaba en silencio, ahora se estaba retorciendo en su asiento y se veía agitada.
"Mel, dile a mami, ¿qué te pasa?".
Adina redujo la velocidad del coche y le preguntó en voz baja.
Melody sacudió la cabeza y dijo en voz baja mientras abrazaba un cojín: "No me siento mal".
Solo parecía tener una sensación de malestar