Capítulo 26.
Prefiero confiar en el instinto de una mujer que en la razón de un hombre.
—Stanley Baldwin.
Hayley:
Después de dejar a Joana en su casa, me fui directamente al hotel, Leon estaba esperando por mi para ir a ver a Jackie y hablar sobre las difamaciones que hizo Raul hacia mi.
—¡Leon! —alcé la voz, busque por la habitación y no estaba, seguramente salió.
Deje el bolso sobre la mesa y escuché la regadera, caminé hasta la puerta del baño que estaba medio abierta, Leon se estaba bañando en silencio.
Me recargue en el umbral para verlo mejor, definitivamente mi esposo tiene un cuerpo increíble, parece irreal.. Y ese trasero, veo que el ejercicio le ha sentado muy bien.
—Señor Fischer.. —volteó a verme rápidamente.
—Joder me asustaste.. ¿Hace cuánto llegaste?
—Hace unos minutos.. ¿Necesitas compañía?
—Es tentadora la oferta pero —salió de la regadera desnudo—, si hubieses llegado unos diez minutos antes, te estaría haciendo el amor justo aquí.
Se acercó a mi y sacudió su cabello mojandome.