Capítulo 24.
La mejor protección para las personas no es necesariamente creer todo lo que la gente les dice.
=Demóstenes.
Leon:
Le di justamente en la nariz, pero no se iba a quedar así el imbécil éste, iba a romperle los dedos.
¿Cómo se atreve a hablar así de Hayley? Sobretodo decir esa sarta de mentiras sobre ella.. No se mucho sobre Hayley pero se perfectamente que ella jamás entraría a un club, ella no tiene pinta de ser así y encima hablar de su intimidad como si tuviese el derecho de hacerlo.
—Abel, saca a todo mundo de aquí —ordené.
El se encargó de sacar a las personas de la panadería, quedamos Hayley, Abel, el padre y la basura de Raul.
—Ahora si idiota —lo tome por la chaqueta y lo alcé—, me vas a explicar porque carajos dijiste esas cosas sobre mi esposa. ¿Qué es lo que buscas? Maldito cobarde.
—¿Me dices cobarde a mi? —rió— cuando fuiste tu quien me llamó aquella vez para que fuera a tu palacio a hacerla sentir mal.
Le di otro golpe en el rostro, lo alce de nuevo.
—Incluso en eso sig