Quisiera que todo esto doliera menos. Princesa Alena.Con ayuda de Bastian, entramos a la habitación que Camelia les indicó. No esperaba un lugar cálido o algo que hiciera sentir más cómoda a mi prima.Yo estaría bien, igualmente Bastian y yo siempre nos cuidamos. Con las cosas tan difíciles con mi padre siendo rey, no la tendría sencilla.Con esos ojos que me derriten el corazón, Bastian me mira avergonzado cuando señala el suelo. Dirijo mi atención a donde él señalaba, y sonrío al ver que esa sería mi cama ahora mismo.—No es lo que acostumbras, pero es todo lo que tenemos. Buscaré unas mantas para que no pases frío —con mucho cuidado me ayuda a sentarme en el suelo—. Perdóname por hacerte pasar todo esto... Camelia es... Ni siquiera puedo decirte que piensa ella.Asiento mientras veo a Kyle hablándole al vientre de mi prima. Sonrío involuntariamente con nostalgia.Por lo menos ella está más cómoda en la cama.—Yo quería muchas cosas contigo, Alena —volteo a ver al hombre que amo,
La vida cambia en un abrir y cerrar de ojos.Media hora después…Princesa Alena.El tiempo había pasado muy rápido para mí, mis ojos ardían por el olor que desprendía el gas lacrimógeno. Bastian estuvo conmigo a mi lado sin dejarme ni un minuto, pero sabía que todo acabaría en cuestión de segundos. Unas personas entraron a la habitación y debíamos desaparecer de aquí. En el camino encontramos a varios heridos, pero nada grave, según Bastian y Kyle. Sentía mi corazón latir fuertemente, al mirar a varios de los guardias de Egan. Tenía miedo de encontrarme a mi hermano herido. Tenía tanto miedo de que mi hermano simplemente desapareciera en un respiro. No quería que nada malo le pasara. La casa era la primera vez que la veía, pero parecía un lugar que en cualquier momento nos tragaría.Lo sabía… algo nos pasaría.—Joder, Kyle, ¿en dónde estás herido? ¿En dónde está el resto de ustedes? —Bastian miró a su amigo, tensando la mandíbula.¿Cuándo pasó eso? Miro a mi alrededor y me doy cuen
Palacio Real de Trastuenguer.Wellington-Nueva Zelanda.Cuatro meses después…Cuatro largos meses han pasado desde que vi la cara de Bastian. Cuatro eternos meses donde mi corazón añora y extraña cada día más a mi guardaespaldas. Cuatro meses donde mis días pasan lentos y solo miro la puerta del lugar donde me encuentre, para ver si él entra, con su aspecto serio y ganas de sacarme de mis casillas con su profesionalismo.Por más que busqué y contraté a los mejores investigadores, no hay rastro de él o Kyle. No hay nada, es como si ellos nunca hubieran existido. El asunto con mi hermano ha ido mejorando. Aunque las cosas con mi padre no tienen ningún tipo de arreglo. El mes pasado asistí a la toma de posesión de Egan. Ahora es el rey de Grecia y actúa como tal. Su primera orden fue prohibirle a mi padre ejercer algún tipo de poder sobre nosotros y contar la verdad de nuestros salvadores. También, permitirme ser liberada de la monarquía griega.Al renunciar al título de princesa de Gre
Me giro como poseída y mis ojos se abren ante el hombre parado frente a mí. Me intento alejar, pero las barandas que hay en el pequeño balcón, me lo impiden. Mi respiración se acelera y llevo mis manos a mi boca cuando empiezo a llorar.—No puede ser… —empiezo a murmurar—, no puede ser cierto —sigo murmurando. Me tambaleo y caigo al suelo.Está vivo. Él se acerca para ponerme su abrigo.—Eres un insensible. Te odio con toda mi alma —me levanta del suelo, él se empieza a reír—. Te esperé por tanto tiempo. Eres un ser humano horrible. Te creí muerto en acción, pero mírate, estabas haciendo tu vida sin mí y viviendo feliz —lo señalo mientras sigo llorando.—Te ha encantado la sorpresa —afirma, como extrañaba esa tonta sonrisa—. No me parece que no te hayan hecho una fiesta de coronación. Debías celebrar tu corona y celebrar mi regreso a casa. Te prometí volver al caer la noche.—¿Estás hablando en serio? —asiente burlón—. Muérete y ve a hacer no sé qué cosas con personas extrañas —me qu
Ella se metió en mis entrañas, se robó mi corazón y amarla fue lo más fácil. Es tan bella, tan libre, tan perfecta y yo la quería para mí. Enamorarse jamás dijo que fuera fácil, pero a mí me sucedió a primera vista. No debí hacerlo, pero en el corazón nadie manda. No soy de esos hombres que aman el romance, pero me gusta la exclusividad.Lo que quiero con ella no lo quiero con nadie más.¿Lo difícil?Ella siendo una princesa no podría amarla como se debe.¿El reto?Conquistarla y dejar de ser amigos con derecho. Lo sé, yo acepté eso porque me gusta esa mujer.¿El problema?Ella piensa... no. Ella está completamente segura de que mantengo una relación con mi compañera.Necesito explicarle a la princesa que se robó mi corazón, que mi amor es sincero y que lo que quiero con ella va más allá del simple sexo casual. Estoy seguro de que aquí seré como las personas de la generación actual.¿Eso es típico de qué signo?Sí, yo soy piscis, ¿y ella?Me llamo Bastian y soy el guardaespaldas de la
Estados Unidos…Bastian.Por muchos años pensé que estaba enamorado de Cam. Ella es una chica que ha sufrido mucho después de que su madre se volvió a casar. A pesar de que Daniels es un excelente hombre que le ha dado todo lo que ella ha querido, la falta de su verdadero papá la convirtió en una chica bipolar.Fui el primer hombre de su vida y también su primer amor. Creí amarla y por eso había decidido comprar una casa para que ahí viviéramos los dos hasta llegar a nuestra vejez. Seré honesto. Antes de conocer a la que hoy es mi jefa, yo sentía que amaba a Cam.El destino me jugó una mala partida y me hizo dudar cuando apareció esa pelirroja de sonrisa alegre. Jamás había dudado de mis sentimientos por Camelia, pero el día que conocí a la princesa Alena, mi mundo dio un vuelco total.El amor que sentía por Camelia era más que todo de hermanos y no saben lo patético que se siente darse cuenta de eso muchos años después.—Zervas —la voz de mi jefe, Daniels, me hace verlo—, ella es la
Unas horas más tarde...Bastian.Las palabras que me dijo Alena me dejaron mal y no lo tengo porque negar. Realmente sabe cómo hacer estragos en mi mente en tan poco tiempo de haber empezado a trabajar con ella. Tampoco me encuentro muy orgulloso de que me guste.Debía ser más profesional y no aceptar eso que me pidió.Admitir que Alena me gusta esta demás, pero es que no sé cómo actuar frente a ella. Tengo miedo de que un día decida desaparecer. Porque déjenme decirles que tengo una suerte para que los que están a mí alrededor decidan dejarme abandonado.Por ejemplo, mis padres...No entiendo porque me dijo que fuéramos amigos con privilegios... estoy seguro de que le gusto, pero no estoy tan seguro de que le guste para que sea mi novia. ¿Cómo puede hacer de la vista gorda después de que prácticamente le dije que me gustaba? Mis acciones hablan por sí solas.Tal vez no...—En ningún momento le has dicho que te gusta. Solo le dijiste que sí, al sexo casual —habló la voz de mi cerebr
Nunca entendí o entenderé por qué soy así con ella. Sinceramente hablando, me desconozco. Soy un tipo normal, agradable, buen amigo y un sujeto trabajador y muchas veces mis amigas, bueno, la señora Larissa, dijo que era un buen partido.Le creo la mayor parte del tiempo...Perdí a mi ahijado en un abrir y cerrar de ojos. La vida no me ha sonreído como yo quisiera desde esa vez y me siento el asesino más miserable del mundo. Por eso he venido viviendo mi existencia como puedo y dejando que todo pase y no me afecte. Camelia fue un bonus para estar un poco alejado de mi desgracia. De verdad que la quiero muchísimo, pero no de la manera que ella quisiera y sí, se lo dije o tal vez con mis acciones se lo hice entender, pero ella simplemente no lo acepta.Con ella también he hecho las cosas mal.No debí confundirla, no debí darle falsas esperanzas mientras ella iba creciendo y estoy muy seguro de que tenía que alejarme, pero mi ser egoísta que creía amarla, no se pudo ir. Tampoco planeé se