CAPITULO 23
— ¡Tú! ¡Así que realmente no eras una sirvienta del Reino! — Gritó sorprendida la guardiana del príncipe. — Yo… No era mi intención mentir. — Dijo lentamente y muy avergonzada la princesa Gorianita. — ¡Oh! Eres aquella señorita que se cayó de la colina. — Dijo el pequeño príncipe acercándose a Virginia hasta que el Rey Lance lo detuvo del brazo.
— Quédate aquí Landel. — El pequeño príncipe levantaba su mirada observando a su padre viendo con bastante seriedad a la señorita que el conoció. — Pero papá, ella cayó rodando toda la colina y Tani la ayudó por qué es una sirvienta que trabaja para ti.
El Rey observaba a su hijo seriamente, anteriormente durante la cena que tuvo con su amigo el Barón Jones antes de que se marchará de regreso a su hogar, este le había informado sobre la situación de la princesa y su salud, también aconsejando que no la exigiera de nuevo hasta que sanara su cuerpo. Sin embargo, el Rey no tenía idea de que Virginia haya tenido ese tipo de accidente