Cap. 27- Los cambios en un hogar
El día del parto de Sol llegó, un niño hermoso, tan blanco como sus padres, con cabello castaño y ojos verdes, mostro desde el primer momento en que nació, que su llanto era fuerte y que sus pulmones estaban tan sanos que ayudaban a su llanto.
Toda la familia estaba fuera de la sala de partos, cuando se oyó el llanto de un niño y eso los hizo sonreír, Wilson había nacido.
Todos estaban felices, para cuando pasaron a ver al niño y a sus papás, Sol tenía un niño pegado a su pecho.
-Venía con hambre- dijo William riendo. Lo que hizo reír a Sol.
Al entrar Girasol a la habitación con una sonrisa dijo.
- No me lo digas, sabes que luego me acobardo más.
- Solo te diré, felicidades tía- dijo Sol.
- Felicidades mami- dijo ella. y se acercó a ambos para tocar al pequeño comelón y besar la mejilla de su mejor amiga. El pequeño comelón, al sentir la caricia de su tía miró a está y soltó el pecho de su mamá.
- Hola príncipe- dijo ella. tocando su manita.
El pequeño apretó su manita en el