Capítulo 60
Isabel no paraba de temblar, estaba aterrada con la situación, pensaba que su hijo era producto no del amor si no de una venganza
Yo la abrazaba fuerte mientras intentaba calmarla, sus manos estaban frías y le costaba respirar, le pedí que se calmara estaba hiperventilando
Entonces noté algo. Un pequeño hilo de sangre entre sus piernas, que dejo un pequeño charco en la alfombra.
—Isabel, estás sangrando —dije con la voz entrecortada —Por favor necesito que estés calmada.
Ella bajó la mirada y se puso pálida.
—No… no puede ser… este bebé es todo lo que tengo, no puedo perderlo —tuvo un pequeño ataque de pánico.
Llamé de inmediato a una ambulancia, mientras la ayudaba a acostarse en la cama.
No quise arriesgarme, La ambulancia llegó, la llevamos al hospital que ya prácticamente se había convertido en mi segunda casa, Le hicieron una ecografía, análisis, y luego el doctor me pidió que esperárara en la sala.
Pasaron unos minutos. Salió con cara seria, revisando sus hojas.
—¿E