Capítulo 17

Sus ojos se oscurecieron al instante.

—¿Sí…? Muéstrame, preciosa… muéstrame lo que sabes hacer.

Me incliné hacia adelante, mi cuerpo empezo a temblar, Él estaba sentado frente a mí, su erección era evidente, marcándose tensa contra la tela de su pantalón.

Saber que solo yo podía provocar eso, me hacia sentir especial, pero con la responsabilidad de ayudarle a "relajarse"

Con movimientos lentos, juguetones, deslicé mis dedos por su abdomen hasta llegar al botón de su pantalón. Lo desabroché sin decir una palabra, saboreando el momento. Él no apartaba la vista de mí, su pecho subía y bajaba más rápido.

—Luisa … —susurró—. Vas a matarme.

Bajé la cremallera con suavidad, liberando su erección. Estaba duro, caliente, en sus ojos podía ver La ansiedad, Lo rodeé con los dedos un segundo, solo para verlo gruñir, y luego me recosté hacia atrás.

Metí su erección entre mis pies, empecé a frotarlo, mientras el me miraba con una sonrisa ladina

—¿Así te gusta? —murmuré.

—Luisa… —jadeó,