La gente estaba inquieta preguntando qué sucedía, pero todo era un completo silencio. Victoria y su equipo de trabajo sí estaban enterados de lo que ocurría; su denuncia en contra de Ray y Erick, por fin, estaba dando resultados.

—Con todo lo que esconde ese par y sus secuaces, es muy probable que se vayan todos a la cárcel —dijo Victoria al ver la cantidad de policías alineados en busca de los que escondían estos malandros.

La preocupación de Andrés aumentaba al ver tantos policías en la empresa; esto no sería nada bueno para la reputación de sus empleados y de la misma empresa. Se reunió con el fiscal del caso para que lo pusiera al tanto de todo, sin omitir detalle alguno.

—Señor Castillo, hay una red de tráfico de personas que opera en muchos países y Colombia no es la excepción. Tenemos pruebas de personal que aquí labora, que se dedica a extorsionar, secuestrar, violar y hasta asesinar a jovencitas.

Andrés recordó las fotos de Victoria en su computadora; ella pudo haber sido víc