Capitulo 30: Si yo lo pierdo... me muero.
11: 40 am.
Nathaniel recién llegaba a las afueras de la mansión de don Gregori Nekrásov.
El hombre de cabello oscuro bajó del vehículo y rodeó el mismo para seguidamente abrirle la puerta a Kristy.
Ella bajó y fue entonces que salieron de la mansión, varios sirvientes acercándose al automóvil y ayudando con el equipaje de Kristy que Nathaniel les pasó.
Una vez Nathaniel ingresó a la glamurosa mansión junto a su novia, vieron bajar por las escaleras a Vladimir.
— El señor Nekrásov lo espera en su oficina, señor Jhonson. — Le habló el hombre rubio a Nathaniel y él asintió pasándole de lado a Vladimir.
Kristy quien expectante iba detrás de Nathaniel fue detenida del brazo por Vladimir.
— Tú no, Don Gregori quiere hablar a solas con él. — Le dijo ese hombre rubio a Kristy.
La hermosa rusa frunció el ceño y se soltó del agarre que ese alto hombre ejercía en su brazo.
— ¡No me toques! — Alzó la voz ella molesta.
Nathaniel quien aún no se había alejado lo suficiente de la escena, v