—Daniels, Gastón ¿Cómo están? —Pregunta Demian no más al entrar en la habitación donde los tenían a ambos.
—Jodidos —Contesta el segundo.
—Nos estaban esperando esos hijos de perra, y se han llevado a Violeta —Argumenta el rubio poniéndose en pie.
Demian ve la convicción de su amigo de salir a la calle en busca de su sobrina lo que lo lleno de orgullo. Pero no podía permitir ponerles en riesgos a todos una vez más, Aurora lo mataría como si alguien más de la familia saliera herido.
—Sera mejor que te quedes y descanses, esa herida en tu cabeza es seria.
—Ni te creas que te dejare toda la diversión, esos putos volaron mi avión. Se los haré pagar.
—Reece y yo nos podemos encargar.
—Yo también iré —Gastón se levanta de la cama.
Con tod