Nicole estaba un poco sorprendida. “¿Pedirte dinero prestado?”.

Julie suspiró y acarició su mascarilla ligeramente arrugada.

“Roman debe una gran suma de multas, así que está desesperado y vino a pedirme ayuda. Vi que se veía bastante lamentable, así que le di una suma de dinero. Pero no usó ese dinero para pagar la multa, sino que lo utilizó para la cocaína. Él es simplemente imprudente y desesperado”.

Los ojos de Nicole se abrieron de par en par, sorprendida. “¿Y luego qué?”.

Julie hizo una mueca. “Cuando me enteré, llamé a la policía. Lo encerraron unos días y volvió a pedirme dinero cuando salió”.

Nicole chasqueó la lengua. “Entonces, ¿te estás escondiendo aquí?”.

Julie murmuró: “K insiste en que me quedé aquí escondida unos días. Así él no se distraerá y hará alguna locura”.

Nicole asintió con aprobación. “Deberías quedarte aquí. De todas formas todavía no me voy a mudar, ¡así que nos podemos hacer compañía!”.

Julie no respondió y suspiró.

“¿Cómo encontré esa escoria de l