[LUCAS]

Una hora y cincuenta y cinco minutos sin saber de ella. Tenía todo un embole en mi cabeza y por más vueltas que daba no veía el auto aparecer por el camino, ni siquiera el humo que esa cosa hacía mientras se conducía.

¿Y si había tenido un accidente? ¿Y si algo malo le había pasado?.

Tenía que buscarla, y ya lo había hecho por los alrededores pero quizá no había sido suficiente para encontrarla.

Junto a mí, en mi desesperada búsqueda, me acompañaba el perro siberian que nos habíamos encontrado ayer por la noche, pero él parecía muy tranquilo, solo movía la cola cuando lo interrogaban, y sacaba su lengua babosa de vez en cuando.

—Yo sé que tú sabes algo, así que dime dónde está esa loca. ¿Dónde está tu madre? —le exigí, pero solo ladró un par de veces y se acomodó sobre el sofá para seguir mordiendo los cojines.

Me había despertado su aliento en mi rostro, luego el ruido de sus ladridos siguiendo al ratón me provocaron dolor de cabeza y por último me desperté al llamar a l