NatashaAl pasar la puerta de aquel hotel de paso, la ropa comienza a salir disparada hacia cualquier sitio de la habitación. Los dos somos conscientes de que no puede haber penetración, pero para mí no es necesario, solo quiero sentirlo. Ethan me besa como nunca, completamente feliz por lo que aca
Anna Roma
Uy, Natasha ya lo intuyó...
¡Muchas gracias por leer la historia! Si te está gustando no te olvides de comentar, votar y dejar tu reseña.