—¿Síndrome? —Maylene se descubre el rostro, confundida en el dolor—, ¿Cómo que síndrome? Hayley es una niña sana…ninguno en nuestra familia sufre de esa enfermedad.
—Debes saber que a ésta edad los niños se enferman más. No voy a dejar que nada le falte a tu hija, Maylene. Y estaremos los dos al pen