"Maldición, Rex, has corrido desnudo por el estadio, esto no te puede dar pena", se dijo.
Así que cuando llegó al mostrador disparó.
—Mi chica tiene el periodo. ¿Cómo la ayudo?
—¡Huye por tu vida! —dijo el hombre que estaba en la fila detrás de él.
—¡No, solo los cobardes huyen, los hombres vali