Nathan se puso de pie.
—No, Su Señoría. No voy a negar a Amelie Wilde ni al hijo que tengo con ella. Hace solo dos semanas supe que los dos estaban vivos y no pretendo ocultarlos.
—Su Señoría, si nos lo permite, nos gustaría llamar a declarar al doctor Benson, ha sido el doctor de la familia duran