— Por favor, no te vayas - susurró Sophie con un tono somnoliento y vacilante.
— Pensé que tenías miedo a los lobos - provoqué con una sonrisa juguetona.
Ella se estiró y se acurrucó en mi pecho, cediendo al sueño. — De los lobos, sí, pero no de ti - murmuró suavemente.
— Tonta - susurré, acariciando el cuerpo desnudo de la hermosa híbrida frente a mí.
Mientras miraba por la ventana y contemplaba el brillo lunar, reconocía las hazañas de los dioses, pero sus propósitos seguían siendo un misterio para mí.
POV: SOPHIE
Sentí un fuerte tirón que me sacó de la cama, haciéndome saltar a la posición de alerta.
— M*****a sea, Alfa, ¿cuál es tu problema? - Gruñí, dándome cuenta de que él era la causa del tirón repentino.
— ¡Tienes reflejos afilados, más de lobo que de humano! - Él evaluó, ignorando mi pregunta.
Miré por la ventana y noté que el sol aún no había salido. Lo miré con enojo.
— ¿Podrías decirme por qué me despertaste tan temprano? - Apreté los puños y señalé hacia la venta