A ver, papá no tenemos el dinero para hacerle frente a una empresa como esta, dijo Emma visiblemente preocupada.

-Mi amor, si tenemos el dinero, a ti nunca te han interesado las finanzas de la empresa, pero desde que tu madre y yo nos casamos hemos trabajado duro para que tu tengas un futuro, este es tu futuro, tenemos varios cientos de millones de dólares en cuentas extranjeras, así que tenemos de sobra para un proyecto como el que el señor Iván nos está proponiendo.

Emma no podía creer lo que su padre le decía, si bien ella sabía que no eran de clase baja, se consideraba de una familia de clase media en donde sus padres le habían dado el estudio y la habían enseñado a ganarse todo en la vida, la consentían con todo lo que quería y por eso ella nunca les pedía nada, para no hacerlos incurrir en gastos que podían desequilibrarlos económicamente.

-Emma, lo que tu padre dice es verdad, ustedes son una de las familias mas prominentes en el país, con las fabricas internacionales, sin toca